A pesar de todo, no hay que pensar que la paz es imposible. En el 2000 se estuvo a punto de lograr un acuerdo de paz viable. Faltó un poco más de coraje y valentía política por ambos lados y... algo más de voluntad por parte de Estados Unidos de presionar a los israelíes. Por parte israelí Barak, el actual ministro de defensa, tuvo la valentía política de ofrecer Gaza, la mayor parte de Cisjordania y Jerusalén Este, incluidos los barrios musulmán y cristiano de la ciudad antigua. Incluso llegó a considerar compensar al futuro estado palestino por las colonias que Israel conservaría en Cisjordania con un tierras en el desierto del Negev, contiguas a Gaza, que harían la economía de este territorio más viable una vez independiente de Israel. Quizás Barak intentó ir demasiado rápido en las negociaciones con Arafat, quizás las condiciones de conservar Israel una parte del territorio de Cisjordania no eran demasiado claras o aceptables para los palestinos, el caso es que al final Arafat no firmó el acuerdo.
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